De la mano de Héctor Tapia.
Desde que asumió en Colo Colo a mediados de octubre de 2013, en reemplazo del renunciado Gustavo Benítez, el actual técnico albo, Héctor Tapia, haciendo dupla con Miguel Riffo, fue dando muestras de su carácter retraído, pero firme y cuando planificó 2014 quiso tres refuerzos de categoría para pelear el título del Torneo de Apertura y de ahí no se movió.
Los arribos del defensor Julio Barroso, el volante Jaime Valdés y el delantero Esteban Paredes llenaron el gusto del novel entrenador, de 37 años, que supo armar un equipo poderoso con esa columna vertebral que le daría frutos.
Los blancos agarraron la punta en la cuarta fecha y no la soltarían más, en medio de una carrera que mantuvo el invicto en los clásicos con victoria 1-0 sobre la 'U' en el Estadio Nacional e igualando 2-2 con Universidad Católica en Macul.
Con 42 puntos en 17 fechas, con 13 triunfos, 1 empate y 3 derrotas, los dirigidos por ‘Tito’ Tapia llegaron a un 82,35% de rendimiento, sacando nueve unidades de ventaja a su más cercano perseguidor, la UC, alcanzando por fin la 30ª estrella, y poniendo fin a una sequía de cinco años sin celebrar.
El gran fracaso del 'Cacique' fue en la Copa Chile 2014-2015, uno de los objetivos impuestos por Blanco y Negro a Héctor Tapia. En la previa Universidad de Concepción, Palestino y Rangers de Talca no asomaban como rivales de riesgo, pero el equipo de Pedrero finalizó en el tercer lugar del Grupo 5, quedando fuera por diferencia de goles, tras caer 0-3 y humillados en la última fecha ante los penquistas.
Colo Colo llegaba al Apertura 2014 como el favorito, amén de un sólido Clausura, reforzarse con el seleccionado nacional Jean Beausejour y el experimentado volante Claudio Maldonado y que los rivales, azules y cruzados, estrenaban a los técnicos Martín Lasarte y Julio César Falcioni, por lo que necesitaban armarse.
Claro que Tapia se empecinó con la llegada de Fabián Orellana, pero el hombre de Celta de Vigo no vino y el cuadro popular se quedó sin un refuerzo que más tarde lamentarían ante la escasez de plantel.
Un complicado empate 1-1 ante el ascendido San Marcos de Arica fue el preludio de un certamen difícil para el campeón, pues los rivales ya sabían que tapando a Jaime Valdés y Esteban Paredes cortaban gran parte del poderío ofensivo.
Con Universidad de Chile arrancada, los albos jamás pudieron consolidar un sistema de juego que fluyera y todo le costaba mucho. Más allá de imponerse en ambos clásicos, el elenco de 'Tito' Tapia resignó gran parte de sus opciones en la derrota ante O'Higgins (2-3) en el cuarta fecha, curiosamente uno de los mejores partidos de los capitalinos.
Capítulo aparte las declaraciones de Julio Barroso insinuando irregularidades en el fútbol chileno, que no sólo distrajo a los jugadores del campo futbolístico, sino que además les dejó enfrentados con todo el mundo al no poder comprobar sus palabras, lo que no cayó nada de bien en los dirigentes de Blanco y Negro.
Once victorias consecutivas en doce fechas no bastaron y los albos terminaron cayendo en la última jornada ante Santiago Wanderers (0-2), dejando una pálida imagen que Héctor Tapia tiene la obligación de cambiar en 2015, para lo que ya cuenta con el fichaje del goleador Humberto Suazo.
Por Roberto R. Berríos S/AgenciaUno Ahmedabad
Desde que asumió en Colo Colo a mediados de octubre de 2013, en reemplazo del renunciado Gustavo Benítez, el actual técnico albo, Héctor Tapia, haciendo dupla con Miguel Riffo, fue dando muestras de su carácter retraído, pero firme y cuando planificó 2014 quiso tres refuerzos de categoría para pelear el título del Torneo de Apertura y de ahí no se movió.
Los arribos del defensor Julio Barroso, el volante Jaime Valdés y el delantero Esteban Paredes llenaron el gusto del novel entrenador, de 37 años, que supo armar un equipo poderoso con esa columna vertebral que le daría frutos.
Los blancos agarraron la punta en la cuarta fecha y no la soltarían más, en medio de una carrera que mantuvo el invicto en los clásicos con victoria 1-0 sobre la 'U' en el Estadio Nacional e igualando 2-2 con Universidad Católica en Macul.
Con 42 puntos en 17 fechas, con 13 triunfos, 1 empate y 3 derrotas, los dirigidos por ‘Tito’ Tapia llegaron a un 82,35% de rendimiento, sacando nueve unidades de ventaja a su más cercano perseguidor, la UC, alcanzando por fin la 30ª estrella, y poniendo fin a una sequía de cinco años sin celebrar.
El gran fracaso del 'Cacique' fue en la Copa Chile 2014-2015, uno de los objetivos impuestos por Blanco y Negro a Héctor Tapia. En la previa Universidad de Concepción, Palestino y Rangers de Talca no asomaban como rivales de riesgo, pero el equipo de Pedrero finalizó en el tercer lugar del Grupo 5, quedando fuera por diferencia de goles, tras caer 0-3 y humillados en la última fecha ante los penquistas.
Colo Colo llegaba al Apertura 2014 como el favorito, amén de un sólido Clausura, reforzarse con el seleccionado nacional Jean Beausejour y el experimentado volante Claudio Maldonado y que los rivales, azules y cruzados, estrenaban a los técnicos Martín Lasarte y Julio César Falcioni, por lo que necesitaban armarse.
Claro que Tapia se empecinó con la llegada de Fabián Orellana, pero el hombre de Celta de Vigo no vino y el cuadro popular se quedó sin un refuerzo que más tarde lamentarían ante la escasez de plantel.
Un complicado empate 1-1 ante el ascendido San Marcos de Arica fue el preludio de un certamen difícil para el campeón, pues los rivales ya sabían que tapando a Jaime Valdés y Esteban Paredes cortaban gran parte del poderío ofensivo.
Con Universidad de Chile arrancada, los albos jamás pudieron consolidar un sistema de juego que fluyera y todo le costaba mucho. Más allá de imponerse en ambos clásicos, el elenco de 'Tito' Tapia resignó gran parte de sus opciones en la derrota ante O'Higgins (2-3) en el cuarta fecha, curiosamente uno de los mejores partidos de los capitalinos.
Capítulo aparte las declaraciones de Julio Barroso insinuando irregularidades en el fútbol chileno, que no sólo distrajo a los jugadores del campo futbolístico, sino que además les dejó enfrentados con todo el mundo al no poder comprobar sus palabras, lo que no cayó nada de bien en los dirigentes de Blanco y Negro.
Once victorias consecutivas en doce fechas no bastaron y los albos terminaron cayendo en la última jornada ante Santiago Wanderers (0-2), dejando una pálida imagen que Héctor Tapia tiene la obligación de cambiar en 2015, para lo que ya cuenta con el fichaje del goleador Humberto Suazo.
Por Roberto R. Berríos S/AgenciaUno Ahmedabad
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