Estratega y ayudantes técnicos reconocieron el desempeño del equipo y anticipan una final que se definirá por los errores.
Llegas a semifinales era un gran logro para la selección de Iquique, pero ello no era suficiente para retornar a casa con una sonrisa en el rostro. En frente tenían a un poderoso combinado de Talca que, si bien mostró sus armas, no le alcanzó para derribar a los nortinos.
De esta manera los iquiqueños aseguraron su presencia en la final del Nacional Sub 15 de Salamanca, instancia a la que llegan tras un largo y difícil camino. “Ha sido un trabajo arduo, muy intenso y extenso para poder llegar a estar gran final, para la cual no me cabe duda que llegan las dos mejores selecciones”, expresó el estratega Luis Albornoz.
En cuanto a la previa del duelo frente a Villa San Martín de Talca, Miguel Ángel Albornoz, ayudante técnico, destacó que en las instancias finales es más fácil enfrentar a los rivales. “En etapas finales es más fácil conocer las debilidades y fortalezas del rival, sabíamos que Talca nos generaría una alta presión durante los primeros quince minutos, porque era en ese tiempo cuando anotaban la mayoría de sus goles”.
Con la semifinal en el pasado, ahora la concentración apunta al duelo decisivo, un partido que según el PF, Víctor Palma, se podría definir por pequeños detalles. “Ambos equipos son muy parejos. El partido se podría definir por los errores”, dijo.
A medida que se avanza de etapa en un torneo, el apoyo de la gente se hace mayor, sin embargo la selección de Iquique dice que esa presión no les preocupa. “En Iquique la gente está expectante, pero intentamos mantener la concentración en el campeonato para cumplir el objetivo de ser campeón”, manifestó Wilper Arévalo, también ayudante técnico.
Por último, también dicen estar orgullosos de que su selección esté en la final pero que eso no es suficiente, porque recalcaron que “una final no solo se debe jugar, sino que también ganar”, dejando un gran desafío para este sábado cuando enfrenten a Rinconada. Ahmedabad
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