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ARICA DA LA VUELTA OLÍMPICA EN RANCAGUA

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Se tituló campeón del fútbol sub 14 en la final nacional de los Juegos Deportivos Escolares.

“No pensé que se iba a mater justo ahí, pero de que lo tiré, lo tiré; no fue suerte”. Dylan Vera desató el llanto.

Se jugaban los descuentos de la final del fútbol de los Juegos Deportivos Escolares del IND y el volante se para frente al balón para lanzar un tiro de esquina; mide sus pasos, toma aire, levanta la cabeza, parece ubicar un punto en el horizonte, se echa un poquito atrás y golpea el balón con confianza.

El efecto que le imprimió a la pelota y el viento que respira en la tarde rancagüina se confabularon en forma perfecta para que el balón se colara en el ángulo del primer palo del arquero porteño, cuyo esfuerzo fue en vano. Era el 3-1 para el equipo del Liceo Domingo Santa María y la confirmación de que los ariqueños eran los mejores del país.

“No nos tenían confianza allá en la región, pero nosotros desde el primer día nos dimos cuenta de que nos podíamos llevar la copa. Esto premia todo el esfuerzo y la garra que pusimos en cada partido, donde siempre nos entregamos por entero”, afirmó emocionado Vera.

Antes de ese gol olímpico, los del extremo norte del país habían hecho méritos suficientes para quedarse con la copa. Aprovechando el desgaste del Colegio Salesiano de Valparaíso, los azules fueron claros dominadores desde el principio. De hecho, se pusieron rápidamente en ventaja gracias a los goles de Sebastián Casas (12’) y Alejandro Sánchez (22’), y sólo un golazo de tiro libre de Francisco Escalona pudo doblegar la resistencia de la sólida defensa ariqueña.

Así, con el 3-1 el conjunto de Arica y Parinacota se transformó en el justo campeón nacional del fútbol de los Juegos Deportivos Escolares organizados por el Instituto Nacional de Deportes. De hecho, fue el único equipo que no perdió ningún partido en toda la semana.

Para el goleador Alejandro Sánchez este título “lo conseguimos con garra y corazón. Todos los partidos los jugamos sin mirar en menos a nuestros rivales y entregándonos por entero para lograr la victoria”.

En una imagen digna de rescatar, cuando sonó el pitazo final los jugadores del equipo campeón no se fueron a celebrar, sino que se acercaron a consolar y a animar a sus compañeros de Valparaíso, quienes agradecieron el gesto. Luego, claro, se entregaron a los festejos.
En tercer lugar quedó el Liceo Santa María de Las Condes, que venció en la definición por el bronce al Liceo Comercial Diego Portales por 3-2.