Organizado por el Club Deportivo Sokol Croata de Punta Arenas.
En nuestro país, desde hace un tiempo a esta parte, se erradicó casi por completo el sistema de competencia en la categoría minibásquet. A partir de ahí, fue que los enfrentamientos válidos por esa división comenzaron a vivirse de otra manera, en forma de encuentros. Lo que sin dudas descomprimió un poco la presión que se había establecido, tanto de los entrenadores, como de los padres sobre los chicos, permitiendo un mejor desarrollo deportivo de éstos. Aunque en su etapa de formación, ahora, sin dudas que la competencia es un ítem que ocupa la columna del haber. Por eso, y con la finalidad de que los chicos pasen al menos una vez por esta experiencia, a la cual deberán acostumbrarse a medida que su reloj cronológico siga avanzando, fue que San Miguel decidió encarar el último fin de semana el Torneo Miguel Angel Leonori, en Punta Arenas. Este fue organizado por el club Sokol de dicha localidad y la experiencia competitiva para el elenco de la calle Piedra Buena no podría haber resultado mejor. Y es que, además, consiguió quedarse con el título del certamen. La versión bordó del santo, completó una primera fase de grupos sin grandes sobresaltos. Superó en juegos consecutivos a Sokol B, Natales e Inacap y se aseguró el número uno de su zona. Luego en el cruce de semifinales, debió enfrentar a Umag, al que se sacó de encima por un contundente 63 a 36. Este resultado lo puso en la final, donde debió enfrentar a Sokol que llegaba tras vencer a Inacap por 64 a 19. El choque entre sokolinos y santos quedó finalmente para los visitantes que se alzaron con la copa. Además, como premio extra, Mateo Bacci fue elegido el mejor jugador del certamen. Por su parte, el combinado negro de San Miguel no pudo avanzar más allá de la fase de grupos, donde finalizó tercero luego de cosechar dos victorias y otras dos derrotas ante Porvenir y Universidad del Mar y Sokol A y Umag respectivamente.
Los nombres
El elenco que se alzó con la presea dorada, fue la versión bordó del santo, que estuvo integrado por: Salvador Mosso, Mateo Bacci, Elías Juárez, Alberto Lebroil, Gonzalo Guzmán, Alvaro Aparicio, Dante Aguilar, Gabriel Brown, Luciano Gutiérrez y Facundo Aroca. Los que no pudieron pasar la fase de grupos, pero que igualmente hicieron una gran tarea en el torneo, sobre todo teniendo en cuenta que en su mayoría estuvo integrado por jugadores categoría 2001, fue el equipo negro, el cual contó entre sus filas a:
Daniel Tapia, Agustín Fabregat, Catriel Aredes, Franco Molina, Blas Hueicha, Enzo Roca, Joaquín Chalub, Martiniano Cabrera, Joaquín Prada, León Giménez Vivanco y Valentín Barría.
Palabra oficial
A su regreso a la ciudad, y a punto de meterse de lleno en la rutina diaria de los entrenamientos, la cabeza visible de San Miguel, Roberto Carballo, enfrentó a los micrófonos y dijo: “La verdad estamos muy contentos por cómo nos fue en Punta Arenas; mas allá del resultado deportivo, que en ésta categoría puede resultar anecdótico, por el comportamiento del grupo, por la posibilidad de experimentar algo nuevo como es la competencia, ya que en nuestro país en ésta categoría nos manejamos en calidad de encuentros, y por haber reforzado el lazo de amistad entre nuestro club y los otros del vecino país, como Umag y Sokol. Además, “contento porque todo eso estuvo acompañado de un campeonato y la verdad es que los chicos lo disfrutaron mucho, porque la pasaron bien y ganaron”. Para finalizar, como todas las movidas organizadas por los clubes de nuestra provincia, es necesaria la colaboración externa para que éstas se puedan concretar. “Quiero agradecerle a los profesores que trabajaron incansablemente durante nuestra estadía en Punta Arenas, Diego y Anabella García, como así también al grupo de padres, cerca de cinco, que acompañó a la delegación e hizo de apoyo a los profesores. También hacer una mención especial a Roberto Borselli y Marisa Oliva por confiar el trabajo de nuestra institución y permitir la utilización de los establecimientos educativos, comprendiendo así el aporte del club a los jóvenes de Río Gallegos. Por último, hacer extensivo esto a las autoridades del colegio María Auxiliadora y Polivalente de Arte”, concluyó el entrenador santo.
Tiempo Sur
En nuestro país, desde hace un tiempo a esta parte, se erradicó casi por completo el sistema de competencia en la categoría minibásquet. A partir de ahí, fue que los enfrentamientos válidos por esa división comenzaron a vivirse de otra manera, en forma de encuentros. Lo que sin dudas descomprimió un poco la presión que se había establecido, tanto de los entrenadores, como de los padres sobre los chicos, permitiendo un mejor desarrollo deportivo de éstos. Aunque en su etapa de formación, ahora, sin dudas que la competencia es un ítem que ocupa la columna del haber. Por eso, y con la finalidad de que los chicos pasen al menos una vez por esta experiencia, a la cual deberán acostumbrarse a medida que su reloj cronológico siga avanzando, fue que San Miguel decidió encarar el último fin de semana el Torneo Miguel Angel Leonori, en Punta Arenas. Este fue organizado por el club Sokol de dicha localidad y la experiencia competitiva para el elenco de la calle Piedra Buena no podría haber resultado mejor. Y es que, además, consiguió quedarse con el título del certamen. La versión bordó del santo, completó una primera fase de grupos sin grandes sobresaltos. Superó en juegos consecutivos a Sokol B, Natales e Inacap y se aseguró el número uno de su zona. Luego en el cruce de semifinales, debió enfrentar a Umag, al que se sacó de encima por un contundente 63 a 36. Este resultado lo puso en la final, donde debió enfrentar a Sokol que llegaba tras vencer a Inacap por 64 a 19. El choque entre sokolinos y santos quedó finalmente para los visitantes que se alzaron con la copa. Además, como premio extra, Mateo Bacci fue elegido el mejor jugador del certamen. Por su parte, el combinado negro de San Miguel no pudo avanzar más allá de la fase de grupos, donde finalizó tercero luego de cosechar dos victorias y otras dos derrotas ante Porvenir y Universidad del Mar y Sokol A y Umag respectivamente.
Los nombres
El elenco que se alzó con la presea dorada, fue la versión bordó del santo, que estuvo integrado por: Salvador Mosso, Mateo Bacci, Elías Juárez, Alberto Lebroil, Gonzalo Guzmán, Alvaro Aparicio, Dante Aguilar, Gabriel Brown, Luciano Gutiérrez y Facundo Aroca. Los que no pudieron pasar la fase de grupos, pero que igualmente hicieron una gran tarea en el torneo, sobre todo teniendo en cuenta que en su mayoría estuvo integrado por jugadores categoría 2001, fue el equipo negro, el cual contó entre sus filas a:
Daniel Tapia, Agustín Fabregat, Catriel Aredes, Franco Molina, Blas Hueicha, Enzo Roca, Joaquín Chalub, Martiniano Cabrera, Joaquín Prada, León Giménez Vivanco y Valentín Barría.
Palabra oficial
A su regreso a la ciudad, y a punto de meterse de lleno en la rutina diaria de los entrenamientos, la cabeza visible de San Miguel, Roberto Carballo, enfrentó a los micrófonos y dijo: “La verdad estamos muy contentos por cómo nos fue en Punta Arenas; mas allá del resultado deportivo, que en ésta categoría puede resultar anecdótico, por el comportamiento del grupo, por la posibilidad de experimentar algo nuevo como es la competencia, ya que en nuestro país en ésta categoría nos manejamos en calidad de encuentros, y por haber reforzado el lazo de amistad entre nuestro club y los otros del vecino país, como Umag y Sokol. Además, “contento porque todo eso estuvo acompañado de un campeonato y la verdad es que los chicos lo disfrutaron mucho, porque la pasaron bien y ganaron”. Para finalizar, como todas las movidas organizadas por los clubes de nuestra provincia, es necesaria la colaboración externa para que éstas se puedan concretar. “Quiero agradecerle a los profesores que trabajaron incansablemente durante nuestra estadía en Punta Arenas, Diego y Anabella García, como así también al grupo de padres, cerca de cinco, que acompañó a la delegación e hizo de apoyo a los profesores. También hacer una mención especial a Roberto Borselli y Marisa Oliva por confiar el trabajo de nuestra institución y permitir la utilización de los establecimientos educativos, comprendiendo así el aporte del club a los jóvenes de Río Gallegos. Por último, hacer extensivo esto a las autoridades del colegio María Auxiliadora y Polivalente de Arte”, concluyó el entrenador santo.
Tiempo Sur