Santos de Brasil es el nuevo campeón de la Copa Libertadores, luego de su victoria por 2-1 en la noche del miércoles ante Peñarol, en un intenso partido que presenciaron más de 40 mil espectadores en el estadio Pacaembú de Sao Paulo.
Al igual que en la igualdad de la ida en Montevideo, el marcador no se movió en todo el primer tiempo. Santos intentaba y se procuró las mejores opciones de gol, pero no podía con la ordenada defensa uruguaya. Hasta el segundo minuto del complemento: en ese instante, Arouca se limpió el camino en una gran jugada y a la entrada del área cedió para Neymar. El derechazo de la joven estrella infló las redes con complicidad del portero Sebastián Sosa, que antes había sacado un par de pelotas imposibles.
Santos comenzó a tocar la Copa en el minuto 69′ cuando Danilo -otro que no llega a los 20 años aún- marcó el segundo. Entonces Peñarol buscó la remontada histórica, descontó con el autogol de Durval (80′) y pareció que ponía en duda el tercer título continental del equipo brasileño. Sin embargo, no ocurrió e incluso Neymar pudo anotar el tercero en el epílogo, cuando su disparo dio en el poste.
Con la victoria sellada, se inició una dura pelea en el campo de juego que involucró a jugadores, suplentes y cuerpo técnico de ambos elencos. ¿El motivo? Hinchas locales ingresaron a la cancha y prendieron la mecha: “Alguien que no era del equipo de Santos nos empezó a provocar, por eso reaccionamos”, explicó el ex Universidad de Chile Juan Manuel Olivera.
“Estamos haciendo historia y somos campeones. Fue el día más feliz de mi carrera”, dijo Neymar, mientras que el técnico Muricy Ramalho -quien dio la vuelta olímpica junto a Pelé- consideró que “Santos fue mejor equipo y mereció ganar la Copa Libertadores”.
De este modo, Santos clasificó al próximo Mundial de Clubes y alcanzó su tercera Copa Libertadores. La última la ganó con Pelé en cancha, en 1963, frente a Boca Juniors. Y la primera, un año antes… a Peñarol. Ahmedabad