En un momento pareció la semifinal de la Copa Libertadores de 1991, entre Colo Colo y Boca Juniors.
Fue en el mismo estadio Monumental. Aquella vez Barticciotto marcó un gol y se formó el tumulto donde incluso hubo perros en la cancha. Ahora fue Felipe Seymour el que anotó y se vino la polémica.
El volante de la U, con un golazo selló el 2-2 que clasificaba a los azules cuando el duelo ya finalizaba, pero uno de los jueces de línea levantó la bandera. El árbitro corrió a hablar con él y validó el tanto.
Todo Alianza de Lima se le fue encima del juez ecuatoriano e incluso un par de jugadores se dieron de golpes con la fuerza policial. El técnico de los peruanos, Gustavo Costas, estaba desencajado, vuelto loco, reclamando contra el cobro. El árbitro casi ni se inmutó y debió ser rodeado por carabineros.
Y fue demasiado insólito lo que vino después, porque en un momento Carlos Vera había dado por terminado el encuentro, pero tras la pelea decidió seguir jugando tres minutos más.
Al final, el gol valió, la U empató 2-2 y clasificó a cuartos de final en un partido que duró 111 minutos.
Y pasó a segundo plano el tanto de Seymour, que se acostumbró a marcar de media distancia y en ese mismo arco, en el norte.
Pero no sólo el tanto del volante quedó en el olvido, también el pobre desempeño de la U en el partido. Los peruanos ataron al equipo de Pelusso y se crearon las mejores ocasiones. Así abrieron la cuenta a los 24' con gol de José Fernández. Igualó el equipo chileno recién a los 62' vía Eduardo Vargas.
Luego vino lo mejor y más potente del pleito. Primero, a cuatro minutos del final, el mismo Fernández puso el 1-2 en favor de la visita. Parecía sentenciado, pero Seymour con un zapatazo colocó el 2-2, cuando se jugaba un minuto de agregado.
La pelea en la cancha para la historia, lo que dicen las estadísticas es que el equipo de Pelusso se instaló entre los ocho mejores de la Copa Libertadores y enfrentará ahora a un viejo conocido: Flamengo, llave en la que los azules harán de local en el estadio Santa Laura. Ahmedabad